BBC
25 enero 2012
Si es frito, que sea
con aceite de oliva o de girasol
Michelle Roberts
Comer alimentos fritos puede que no sea malo para el
corazón, mientras para ello se use aceite de oliva o de girasol, dicen los
expertos.
Los
investigadores descubrieron que no existe un aumento del riesgo de enfermedades
del corazón o muerte prematura relacionada a la comida cocinada de esta forma.
Pero
los científicos destacan que sus hallazgos, basados en el estudio de la dieta
típica española en la que estos aceites "saludables" se encuentran en
abundancia, no se aplica a la manteca de cerdo u a otros aceites.
Por
ello, las frituras tradicionales no deben ser algo habitual, informan en la
página bmj.com.
Grasas
Cuando
los alimentos se fríen ganan en calorías porque la comida absorbe la grasa del
aceite.
Y
los expertos saben que comer mucha comida rica en grasas puede aumentar la
presión arterial y el colesterol, los cuales son factores de riesgo para el
corazón.
Para
el estudio, los investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid relevaron
los casos de 40.757 adultos y su dieta.
A
los participantes se les preguntó por los tipos de alimentos que comen en una
semana normal y cómo se prepara y cocina esa comida.
Ninguno
de los adultos tenía signos de sufrir del corazón al comienzo de este estudio
de 11 años, pero al final del mismo habían tenido lugar 606 incidentes
relacionados con el corazón y 1.134 muertes.
Cuando
los investigadores estudiaron los incidentes en particular no encontraron
relación con los alimentos fritos de la dieta.
Esto,
consideran, se debe al tipo de aceite con el que se cocinan los alimentos.
La dieta mediterránea
En
un editorial, el profesor Michael Leitzman de la
Universidad de Regensburg en Alemania sostuvo que
"tomado en conjunto, el mito de que los alimentos fritos son en general
malos para el corazón no se sostiene en evidencia de la que dispongamos".
"Sin
embargo, esto no significa que comer frecuentemente platos como pescado frito
con papas fritas no vaya a tener consecuencias en la salud", aclara.
"El
estudio sugiere que aspectos específicos de los alimentos fritos son
relevantes, como el aceite utilizado, junto a otros aspectos de la dieta",
insiste Leitzman.
La
dieta mediterránea ha sido largamente aclamada como saludable, abundante en
alimentos bajos en grasas, rica en fibras, frutas frescas, vegetales, así como
pescado fresco.
Numerosos
estudios han mostrado una dieta balanceada como esta puede bajar el riesgo de
enfermedades como el cáncer y las enfermedades del corazón.
"Antes
de usar la sartén es importante recordar que este es un estudio de la dieta
mediterránea, no sobre platos británicos como pescado y papas fritos. Nuestra
dieta en el Reino Unido difiere de la española, por lo que no podemos decir que
el resultado sería el mismo para nosotros" expresó Victoria Taylor, una
experimentada dietóloga de la British
Heart Foundation.
"Los
participantes del estudio utilizaron grasas no saturadas como los aceites de
oliva y de girasol para freír sus alimentos", señala. "Actualmente
recomendamos cambiar grasas saturadas como la mantequilla, la manteca de cerdo,
o aceite de palma, por las no saturadas como forma de mantener bajo el
colesterol y este estudio da más razones para hacer ese cambio", opina
Taylor.
"Más
allá de los métodos de cocción utilizados, consumir alimentos con alto
contenido de grasas significa una alta ingestión de calorías. Esto puede llevar
a aumentar de peso y a la obesidad, lo cual es un factor de riesgo para el
corazón", recuerda la experta en alimentación. "Una dieta bien
balanceada, abundante en frutas y vegetales y con sólo un poco de alimentos
ricos en grasas, es lo mejor para un corazón saludable".